jueves, 24 de agosto de 2023

UN MANDAMIENTO NUEVO | Canto de Comunión |

UN MANDAMIENTO NUEVO

Autor: Antonio Alcalde   
Ritmo: Balada ↓↓↑↓
Usos: Canto de Comunión | Tiempo ordinario | 


Un mandamiento
                   B 
nuevo nos da el Señor:
 F#m                     E 
que nos amemos todos
     B7             E 
como nos ama Dios.
         E 
1. La señal de los cristianos
      F#m                 B7     E  
es amarnos como hermanos.
      E 
2. Quien a sus hermanos no ama,
          F#m                 B7     E  
miente si a Dios dice que ama.
         
3. Cristo, Luz, Verdad y Vida,
F#m                 B7     E  
al perdón y amor invita.
         E 
4. Perdonemos al hermano
F#m                 B7     E  
como Cristo ha perdonado.
         E  
5. En trabajos y fatigas
F#m                 B7     E  
Cristo a todos nos anima.

6. Comulguemos con frecuencia
para amarnos a conciencia.

7. Nuestra fe no desfallezca,
que el Señor es nuestra fuerza.

8. Quiten odios y rencores
de todos los corazones.

9. Si al enfermo visitamos
a Dios mismo consolamos.

10. En la vida y en la muerte
Dios nos ama para siempre.

Misal Diario Viernes 25 de Agosto 2023

 Misal Diario

San Luis, rey de Francia; san José de Calasanz, presbítero

Feria o Memoria Libre: Verde o Blanco 
20ª semana del Tiempo Ordinario
Viernes 25 de Agosto 2023


San José de Calasanz nació el 11 de septiembre de 1556 en el castillo de Calasanz, cerca de Peralta de la Sal, Aragón, España.
Hijo del gobernador de la región, Pedro Calasanza y de María Gastonia.
Cursó estudios en la escuela de Peralta y tras sus estudios clásicos en Estadilla, estudió filosofía y leyes en Lérida, recibiendo el doctorado en leyes. Posteriormente, completó con honores cursos de teología en Valencia y Alcalá de Henares (España).Sufrió una enfermedad en 1582 que lo llevó al borde de la muerte y prometió que si Dios le concedía la curación, se dedicaría a trabajar por la salvación de las almas. Tras curarse fue ordenado sacerdote el 17 de diciembre de 1583, por Hugo Ambrosio de Moncada, obispo de Urgel.

Inicia su ministerio sacerdotal en la Diócesis de Albarracín. Renunció a sus cargos, y repartiendo entre los pobres las grandes riquezas que había heredado de sus padres, se dirigió a pie a Roma en 1592,  En noviembre de 1597, abrió la primera escuela pública gratuita en Europa.  A sus institutos educativos los llamó "Escuelas Pías" y los padres que acompañaban al padre Calasanz se llamaron Escolapios.

EL JUSTO FLORECERA

 EL JUSTO FLORECERA
Autor: Hermanos Devia  
Ritmo: 3/4 ↓ ↓↓
Usos: Canto de Salida | Tiempo ordinario | 

Am
Bueno es alabar al Señor
                                            E
y a su nombre folclores cantar,
de mañana su gloria anunciar
                               Am
y de noche su fidelidad.


Con la seis cuerdas del guitarrón
                                       E
y marimbas de rítmico son,
pues tus hechos me alegran Señor,
                                    Am
son tus obras mi felicidad.

                              G
-El justo florecerá
                  F                       E
como la palma primaveral
   Dm                 Am
y se multiplicará
             E                    Am
como cedro de Líbano – (2)

Am
Son tus obras excelsas Señor
                                        E
y es profundo tu eterno pensar,
el que es necio no ve tu poder
                                     Am
y el que peca ignora tu amor.

Am
Aunque abunden las obras del mal
                                        E 
y cual yerba nazca el pecador,
a la ruina sus obras irán
                                        Am
porque Tú eres el Santo Señor.
El justo…

Am
Exaltaste del mal al poder
                                      E
y ungiste con oleo de amor,
pues sus ojos del mal apartó
                                   Am
y lo bueno su oído escuchó.

Am
En tus atrios plantado el Señor
                                           E
y en tu casa naciendo cual flor,
con sus obras eternas de amor
                                   Am
tu justicia proclama sin fin
El justo…

Am
Con tus hondos mensajes de amor
                                   E
haces vibrar a mi corazón.
Con tus hechos me alegro Señor
                                         Am
porque Tú eres el Santo, mi Dios.

Am
Bueno es alabar al Señor
                                            E
y a su nombre folclores cantar,
de mañana su gloria anunciar
                             Am
y de noche su fidelidad.
El justo…

miércoles, 23 de agosto de 2023

ANUNCIAREMOS TU REINO

ANUNCIAREMOS TU REINO
Autor: María Pilar Figuera

                   Em                 B7         Em
ANUNCIAREMOS TU REINO, SEÑOR,
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                      C      B7
1.Reino de paz y justicia,
               Em   C     B7
Reino de vida y verdad.

G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                          C      B7
2.Reino de amor y de gracia,
                      Em   C     B7
Reino que habita en nosotros.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                           C      B7
3.Reino que sufre violencia,
                        Em   C     B7
Reino que no es de este mundo.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                            C      B7
4.Reino que ya ha comenzado,
               Em   C     B7
Reino que no tendrá fin.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

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Misal Diario Jueves 24 de Agosto 2023

Misal Diario
San Bartolomé, Apóstol
Fiesta-Rojo 
20ª semana del Tiempo Ordinario
Jueves 24 de Agosto 2023

Antífona de Entrada

Anuncien día tras día la salvación de Dios y proclamen sus maravillas a todas las naciones. 
Se Canta Gloria.

Oración Colecta

Oremos: Fortalece en nosotros, Señor, la fe con que tu santo apóstol Bartolomé se entregó con generosidad a tu Hijo, y por su intercesión, haz que tu Iglesia sea sacramento de salvación para todos los pueblos.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.

Primera Lectura
Lectura del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan (21, 9-14)

Uno de los ángeles me habló y me dijo: “Ven, que te voy a enseñar a la novia, a la esposa del Cordero”. Entonces me transportó en espíritu a una montaña elevada y me mostró a Jerusalén, la ciudad santa, que descendía del cielo, resplandeciente con la gloria de Dios. Su fulgor era semejante al de una piedra preciosa, como el de un diamante cristalino. Tenía una muralla ancha y elevada, con doce puertas monumentales, y sobre ellas, doce ángeles y doce nombres escritos, los nombres de las doce tribus de Israel. Tres de estas puertas daban al oriente, tres al norte, tres al sur y tres al poniente. La muralla descansaba sobre doce cimientos, en los que estaban escritos los doce nombres de los apóstoles del Cordero
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor

Salmo Responsorial Salmo 144
 
Señor, que todos tus fieles te bendigan.  
  • Que te alaben, Señor, todas tus obras y que todos tus fieles te bendigan. Que proclamen la gloria de tu reino y den a conocer tus maravillas.
  • Que muestren a los hombres tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino. Tu reino,       Señor, es para siempre y tu imperio, por todas las generaciones.
  • Siempre es justo el Señor en sus designios y están llenas de amor todas sus obras. No está lejos de aquellos que lo buscan; muy cerca está el Señor, de quien lo invoca.
  • Tu victoria, Señor, le ha dado fama, lo has cubierto de gloria y de grandeza. Sin cesar le     concedes  tus favores y lo colmas de gozo en tu presencia.
A  Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Maestro, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el rey de Israel.
Aleluya.
 
Evangelio
Lectura del santo Evangelio según san Juan (1, 45-51)
Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo, Felipe se encontró con Natanael y le dijo: “Hemos encontrado a aquel de quien escribió Moisés en la ley y también los profetas. Es Jesús de Nazaret, el hijo de José”. Natanael replicó: “¿Acaso puede salir de Nazaret algo bueno?” Felipe le contestó: “Ven y lo verás”. Cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo: “Este es un verdadero israelita en el que no hay doblez”. Natanael le preguntó: “¿De dónde me conoces?” Jesús le respondió: “Antes de que Felipe te llamara, te vi cuando estabas debajo de la higuera”. Respondió Natanael: “Maestro, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el rey de Israel”. Jesús le contestó: “Tú crees, porque te he dicho que te vi debajo de la higuera. Mayores cosas has de ver”. Después añadió: “Yo les aseguro que verán el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre”. 
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
 
Oración de los Fieles
Hermanos, oremos a Dios que ha querido edificar su Iglesia sobre la fe firme de los apóstoles, y por intercesión de San Bartolomé digamos:  Te rogamos, óyenos. 

  • Para que la Iglesia del nuevo milenio viva la fe que ha recibido en toda su pureza y la transmita con fidelidad, entrega y compromiso. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos. 
  • Para que el mensaje del Evangelio arraigue en el corazón de todos los hombres y los transforme según la medida del amor de Dios. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos. 
  • Para que los religiosos confiesen con sus vidas que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que sean muchos quienes lo sigan. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos. 
  • Para que los que tienen poder de decisión en la marcha de nuestra sociedad se esfuercen por hacerla cada vez más justa, fraterna y solidaria. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos. 
  • Para que los cristianos que son perseguidos a causa de su adhesión a Jesucristo, por la intercesión de San Bartolomé experimenten firmeza, ilusión y alegría serena. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos. Para que todos nosotros, en nuestra vida cotidiana, vivamos como Jesús: haciendo el bien, amando a todos y sembrando paz. Oremos al Señor. Te rogamos, óyenos.
Celebrante: Oh Dios, que con tu poder confirmas el testimonio de aquellos que eliges para que anuncien el Evangelio; escucha nuestras súplicas, llénanos de la sabiduría de tu Espíritu y haz que permanezcamos fieles a Ti hasta que vengas a buscarnos en tu gloria. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Oración sobre las Ofrendas Señor,
Celebrante: Señor, que el sacrificio de alabanza que vamos a ofrecerte en la fiesta del apóstol san Bartolomé, nos obtenga, por su intercesión, tu ayuda generosa.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
 
Antífona de la Comunión
Yo les daré a ustedes el Reino que mi Padre me tiene preparado, y en él comerán y beberán a la mesa conmigo. 
 
Oración después de la Comunión Oremos: Al celebrar la fiesta del apóstol san Bartolomé, hemos recibido la prenda de la salvación eterna y te pedimos, Señor, que sea para nosotros auxilio tanto en la vida presente como en la futura.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén

JUNTOS COMO HERMANOS

INTRO: D, Bm, A7

  D                                 Bm
Juntos como Hermanos
 D                                      A7
Miembros de la Iglesia

Bm                   F#m           G             D
vamos caminando   al encuentro
A7         D
del Señor. (2)

                          A7                 D                     A7                
Un largo caminar por el desierto Bajo el sol
D                   Bm  F#m    G     D       A7       D
no podemos avanzar, Sin la ayuda del Señor.

SEÑOR TEN PIEDAD (Marco López )

Dm C  Dm
Dm                  C            Dm
Señor ten piedad de noso_tros X2
C                 A7               Dm
Cristo ten piedad de nosotros X2
Dm                  C            Dm
Señor ten piedad de noso_tros X2

GLORIA EN LAS ALTURAS

F                                  A#                   
Gloria a Dios en las alturas 
C7                                  F
y en la tierra al hombre paz.
                                        A#                           
Tu bondad está en el hombre 
C7                           F
a quien amas de verdad.

                      A#                 F        
Por tu inmensa gloria damos esquema 
                    C7                 F
muchas gracias sin cesar.    
                A#                     F                         
Te alabamos, te adoramos, 
C7                          F
Padre nuestro celestial.

 F                                   A#               
Tú que quitas el pecado, 
C7                    F
siendo víctima pascual,
                                       A#               
No te olvides de tu pueblo, 
C7                      F
de nosotros ten piedad.

F                                     A#        
Porque sólo Tú eres santo, 
C7                         F
Jesucristo, ten piedad;
                                        A#                 
Tú que estás a la derecha d
C7                        F
de Dios Padre inmortal.

F                     A#         
A ti, Espíritu divino, 
C7                          F
te invocamos con afán;
                                      A#                 
Que en tu amor siempre vivamos 
C7                        F
en perfecta unidad.
 
SALMO RESPONSORIAL 

C                     F                    C            G          C
Señor, que todos tus fieles te bendigan.  


ALELUYA 

G   Em    D    G 
Aleluya, aleluya,
G   Em    Am    G 
Aleluya, aleluya.

 TE PRESENTAMOS EL VINO Y EL PAN
G             Bm          C            G
Te presentamos el vino y el pan
C           G Em       Am      D7 G
Bendito seas   por siempre Señor
G   C          G
Bendito seas Señor
       C                           G
Por este pan que nos diste
C                                     Bm   Em     Am  D7
Fruto de la tierra y del trabajo de los hombres
G   C          G
Bendito seas Señor
    C                    G
El vino tu nos lo diste
C                                  Bm   Em     Am  D7
Fruto de la vid y del trabajo de los hombres

SANTO (LUNA)
 
Bm   Em     A      D
  Santo,      Santo,
   G                Em              F#m     Bm
 Santo es el Señor Dios del universo
Bm      Em            A               D       
llenos están los cielos y la tierra
  G         Em      F#m  Bm
 de su Gloria ¡Hosanna!
Bm   Em      A     D      G    Em   F#m    Bm
Hosanna  Hosanna  Hosanna en el cielo (2)
   Bm                       Em           
Bendito es el que viene
        A                    D
en Nombre del Señor,
  G                     Em      F#m  Bm
Hosanna en el cielo, Hosanna
 
CORDERO DE DIOS 2

Em  D        Em       Em  D        Em
Cordero de Dios. Cordero de Dios
        G              D            Em
Que quitas el pecado del mundo
          Em    C D       Em                
Ten piedad    de nosotros, 
Em   C    D     Em
Ten piedad     de nosotros (2)

Em  D        Em       Em  D        Em
Cordero de Dios. Cordero de Dios
        G              D            Em
Que quitas el pecado del mundo
        Em    C   D   Em             
  daaanos       la paaaz
        Em    C   D     Em  E7
  daaanos       la paaaz

ANUNCIAREMOS TU REINO
Autor: María Pilar Figuera

                   Em                 B7         Em
ANUNCIAREMOS TU REINO, SEÑOR,
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                      C      B7
1.Reino de paz y justicia,
               Em   C     B7
Reino de vida y verdad.

G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                          C      B7
2.Reino de amor y de gracia,
                      Em   C     B7
Reino que habita en nosotros.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                           C      B7
3.Reino que sufre violencia,
                        Em   C     B7
Reino que no es de este mundo.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

                            C      B7
4.Reino que ya ha comenzado,
               Em   C     B7
Reino que no tendrá fin.
G      D   C      B7       Am  B7  Em
TU REINO, SEÑOR, TU REINO.

MADRE ERES TERNURA
 
D            Em  A7         D
Madre eres ternura Eres una flor
Bm         Em      A7            D
Blanca y preciosa Llena de amor (2)
 
                          Em A7         D
Si, Señora ven a mi Ven, ven a mi
  Bm            Em A7       D
Cúbreme con tu manto Lleno de amor (2)

Misal Diario Miércoles 23 De Agosto 2023


 



Misal Diario
Miércoles 23 De Agosto 2023      
20ª semana del Tiempo Ordinario

Antífona de Entrada

No me abandones, Señor, Dios mío, no te alejes de mí. Ven de prisa a socorrerme, Señor mío, mi salvador.

Oración Colecta

Oremos: Dios omnipotente y misericordioso, a cuya gracia se debe el que tus fieles puedan servirte digna y laudablemente, concédenos caminar sin tropiezos hacia los bienes que nos tienes prometidos.

Por nuestro Señor Jesucristo...

Amén.

Primera Lectura

Lectura del libro de los Jueces (9, 6-15)

En aquellos días, se reunieron todos los hombres de Siquem y todas las familias de Bet-Mil-Lo y proclamaron rey a Abimélek, junto a la encina de la piedra memorial que hay en Siquem. Se lo anunciaron a su hermano Jotam, quien subió a la cumbre del monte Garizim, y desde ahí levantó la voz y clamó: “Escúchenme hombres de Siquem, y que Dios los escuche a ustedes. Una vez los árboles fueron a buscarse un rey. Le dijeron al olivo: ‘Sé nuestro rey’. Pero el olivo les respondió: ‘¿Voy a renunciar al aceite que utilizan los dioses y los hombres, para ir a presumir por encima de los árboles?’ Entonces, los árboles le dijeron a la higuera: ‘Ven a ser nuestro rey’. La higuera les respondió: ¿Voy a renunciar a mis dulces y sabrosos frutos, para ir a presumir por encima de los árboles?’ Le dijeron luego los árboles a la vid: ‘Ven a ser nuestro rey’. La vid les respondió:‘¿Voy a renunciar a mi vino, que alegra a los dioses y a los hombres, para ir a presumir por encima de los árboles?’ Finalmente, todos los árboles le dijeron a la zarza: ‘Ven a ser nuestro rey’. La zarza les respondió: ‘Si de veras quieren hacerme su rey, vengan a descansar bajo mi sombra. Pero si no es así, que brote fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano’ ”.

Palabra de Dios.

Te alabamos, Señor

Salmo Responsorial Salmo 20

C          Am        F               G                 C
 De tu poder, Señor, se alegra el rey.

     De tu poder, Señor, se alegra el rey, se alegra con el triunfo que le has dado.

     Le otorgaste lo que él tanto anhelaba, no rechazaste el ruego de sus labios.

     Lo colmaste, Señor, de bendiciones, con oro has coronado su cabeza. La vida te pidió, tú se la diste, una vida por siglos duradera.

     Tu victoria, Señor, le ha dado fama, lo has cubierto de gloria y de grandeza. Sin cesar le concedes  tus favores y lo colmas de gozo en tu presencia.

Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.

La palabra de Dios es viva y eficaz y descubre los pensamientos e intenciones del corazón.

Aleluya.

 

Evangelio

Lectura del santo Evangelio según san Mateo (20, 1-16)

Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: “El Reino de los cielos es semejante a un propietario que, al amanecer, salió a contratar trabajadores para su viña. Después de quedar con ellos en pagarles un denario por día, los mandó a su viña. Salió otra vez a media mañana, vio a unos que estaban ociosos en la plaza y les dijo: ‘Vayan también ustedes a mi viña y les pagaré lo que sea justo’. Salió de nuevo a medio día y a media tarde e hizo lo mismo.

Por último, salió también al caer la tarde y encontró todavía otros que estaban en la plaza y les dijo: ‘¿Por qué han estado aquí todo el día sin trabajar?’ Ellos le respondieron: ‘Porque nadie nos ha contratado’. El les dijo: ‘Vayan también ustedes a mi viña’. Al atardecer, el dueño de la viña le dijo a su administrador: ‘Llama a los trabajadores y págales su jornal, comenzando por los últimos hasta que llegues a los primeros’. Se acercaron, pues, los que habían llegado al caer la tarde y recibieron un denario cada uno. Cuando les llegó su turno a los primeros, creyeron que recibirían más; pero también ellos recibieron un denario cada uno. Al recibirlo, comenzaron a reclamarle al propietario, diciéndole: ‘Esos que llegaron al último sólo trabajaron una hora, y sin embargo, les pagas lo mismo que a nosotros, que soportamos el peso del día y del calor’. Pero él respondió a uno de ellos: ‘Amigo, yo no te hago ninguna injusticia. ¿Acaso no quedamos en que te pagaría un denario? Toma, pues, lo tuyo y vete. Yo quiero darle al que llegó al último lo mismo que a ti. ¿Qué no puedo hacer con lo mío lo que yo quiero? ¿O vas a tenerme rencor porque yo soy bueno?’. De igual manera, los últimos serán los primeros, y los primeros, los últimos”.

Palabra del Señor.

Gloria a ti, Señor Jesús.

 

Oración sobre las Ofrendas Señor,

que este sacrificio sea para ti una ofrenda pura, y nos obtenga la plenitud de tu misericordia.

Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

 

Antífona de la Comunión

Me has enseñado el sendero de la vida, me saciarás de gozo en t u presencia, Señor.

 

Oración después de la Comunión Oremos: Te rogamos, Señor, que aumente en nosotros la acción de tu poder y que, alimentados con estos sacramentos celestiales, tu favor nos disponga para alcanzar las promesas que contienen.

Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén


VIENEN CON ALEGRÍA
D
Vienen con alegría, señor,
                                                    D7            
Cantando vienen con alegria, señor,
G              A                F#m       Bm
Los que caminan por la vida, señor, 
     G                     A          D      
Sembrando tu paz y amor.

D                                         A
Vienen trayendo la esperanza
                                            D
a un mundo cargado de ansiedad,
                                                      A
un mundo que busca y que no alcanza
                                       D      
caminos de amor y de amistad.

TEN PIEDAD  (Marco López)
Dm C  Dm
Dm                  C            Dm
Señor ten piedad de noso_tros X2
C                 A7               Dm
Cristo ten piedad de nosotros X2
Dm                  C            Dm
Señor ten piedad de noso_tros X2

ALELUYA 
G   Em    D    G 
Aleluya, aleluya,
G   Em    Am    G 
Aleluya, aleluya.


 TE PRESENTAMOS EL VINO Y EL PAN

G             Bm          C            G

Te presentamos el vino y el pan

C           G Em       Am      D7 G

Bendito seas   por siempre Señor

G   C          G

Bendito seas Señor

       C                           G

Por este pan que nos diste

C                                     Bm   Em     Am  D7

Fruto de la tierra y del trabajo de los hombres

G   C          G

Bendito seas Señor

    C                    G

El vino tu nos lo diste

C                                  Bm   Em     Am  D7

Fruto de la vid y del trabajo de los hombres


SANTO (LUNA)

 

Bm   Em     A      D

  Santo,      Santo,

   G                Em              F#m     Bm

 Santo es el Señor Dios del universo

Bm      Em            A               D       

llenos están los cielos y la tierra

  G         Em      F#m  Bm

 de su Gloria ¡Hosanna!

Bm   Em      A     D      G    Em   F#m    Bm

Hosanna  Hosanna  Hosanna en el cielo (2)

   Bm                       Em           

Bendito es el que viene

        A                    D

en Nombre del Señor,

  G                     Em      F#m  Bm

Hosanna en el cielo, Hosanna


CORDERO DE DIOS 2

Em  D        Em       Em  D        Em
Cordero de Dios. Cordero de Dios
        G              D            Em
Que quitas el pecado del mundo
          Em    C D       Em                
Ten piedad    de nosotros, 
Em   C    D     Em
Ten piedad     de nosotros (2)

Em  D        Em       Em  D        Em
Cordero de Dios. Cordero de Dios
        G              D            Em
Que quitas el pecado del mundo
        Em    C   D   Em             
  daaanos       la paaaz
        Em    C   D     Em  E7
  daaanos       la paaaz

EUCARISTÍA MILAGRO DE AMOR
 
D                 Bm                Em          A7
Pan transformado en el cuerpo de Cristo
 D                Bm               Em             A7
Vino transformado en la sangre del Señor
D               Bm         Em        A7
Cristo nos dice: 'Tomen y coman',
D                Bm               G              A
Este es mi cuerpo que ha sido entregado
 
D         G     Bm        F#m
Eucaristía milagro de amor
G            D            A            D
Eucaristía, presencia del Señor (2)
 
Cristo en persona nos viene a liberar,
De nuestro egoísmo y la división fatal
O gran invento de cristo sabio y bueno
Para alimentarnos con su sangre y con su cuerpo
 
Cuando comulgamos nos unimos al Señor,
formamos entre todos la familia del amor…
En la familia de todos los cristianos,
Cristo quiere unirnos en la paz y en el amor.
 
Con este pan tenemos vida eterna,
Cristo nos invita a la gran resurrección
Este alimento renueva nuestras fuerzas,
para caminar a la gran liberación

MADRE ERES TERNURA
 
D            Em  A7         D
Madre eres ternura Eres una flor
Bm         Em      A7            D
Blanca y preciosa Llena de amor (2)
 
                          Em A7         D
Si, Señora ven a mi Ven, ven a mi
  Bm            Em A7       D
Cúbreme con tu manto Lleno de amor (2)



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martes, 22 de agosto de 2023

ESQUEMA DE CANTOS XXII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO 27-08-2023

 CANTO DE ENTRADA

Reunidos en el nombre del Señor

        G                 C                G  
Reunidos en el nombre del Señor,
        C                 A7                    D 
que nos ha congregado ante su altar,
      Am           D7          G     Em 
/ celebremos el misterio de la fe,
         C6                D7          G  
bajo el signo del amor y la unidad./


              G                 D                    G  
1. Tú, Señor, da sentido a nuestra vida,
      Em                        A7         D 
tu presencia nos ayuda a caminar,
     G                   B7            Em 
tu Palabra es fuente de agua viva,
      C                  Am 
que nosotros, sedientos,
     Bm    C6   D7    G  
a tu mesa venimos a buscar.


         G                             C               G  
2. Purifica con tu gracia nuestras manos,
   Em                     A7            D 
ilumina nuestra mente con tu luz,
     G                    B7            Em 
y la fe se fortalezca en tu Palabra,
       C                Am         Bm 
y tu Cuerpo, tomado en alimento,
     C6   D7    G  
nos traiga la salud.

lunes, 21 de agosto de 2023

XXIV Domingo del Tiempo Ordinario 17 de Septiembre 2023

 XXIV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
"Ten paciencia conmigo"
MISAL DOMINGO 17 DE SEPTIEMBRE 2023

Lectio Divina XXII Domingo Del Tiempo Ordinario Ciclo A, 03 de Septiembre 2023

 LECTIO DIVINA

Lectio Divina XXIII Domingo del Tiempo Ordinario Ciclo A, 10 de Septiembre 2023

 LECTIO DIVINA

Lectio Divina XXI Domingo del Tiempo Ordinario Ciclo A, 27 de Agosto 2023

 LECTIO DIVINA

ORACION AL ESPIRITU SANTO

LECTURA DEL TEXTO BIBLICO   (Mt 16,13-20)
¿Qué dice el texto?

Señor, Tú que preguntaste qué pensaba la gente de ti, y le preguntas a tus discípulos quién eres, te Pedimos que nos envíes tu Espíritu para que nos haga entender tu Palabra y podamos decir que tú Eres el Hijo de Dios vivo, y que nos invitas a participar de tu Reino. Todo esto te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 
En aquel tiempo, cuando llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta pregunta a sus discípulos: “¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?”. Ellos le respondieron: “Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o alguno de los profetas”.
 
Luego les preguntó: “Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?”. Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”. Jesús le dijo entonces: “¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi Padre, que está en los cielos! Y yo te digo a ti que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella. Yo te daré las llaves del Reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo”. Y les ordenó a sus discípulos que no dijeran a nadie que Él era el Mesías. Palabra del Señor.
 
Pistas de reflexión
 
Contexto bíblico
 
La región en que tiene lugar la escena se encuentra al noreste de Galilea de los paganos. Sin ser totalmente una tierra extranjera, la región participa mucho de esta condición. Si a esto se añade el contexto precedente que habla de la prevención contra la enseñanza específicamente religiosa judía, tendremos que concluir que san Mateo está presentando y escribiendo en clave y perspectiva de una nueva realidad religiosa. Esta nueva realidad va a recibir en este texto el nombre de Iglesia de Jesús (v.18). Es la primera vez que el término Iglesia (Gr. ἐκκλησία, ecclesia) aparece en el Evangelio de Mateo para designar la comunidad de discípulos de Jesús, es decir, la comunidad de creyentes en él.
 
Este texto tiene dos núcleos. El primero es el atrevido anuncio de Pedro: “Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo” (v. 16). El segundo es la bendición y legitimación de Pedro. El texto nos pone en presencia de una doble identificación: por una parte, Jesús pregunta cómo le identifica la gente; por otra, Pedro es identificado por Jesús tras la confesión de fe de él. Además, si tenemos en cuenta el género literario de este pasaje típicamente semítico, resulta evidente que es Jesús quien dio a Simón el nombre de Pedro, con todo el simbolismo que dicho nombre comporta.
 
 
Texto bíblico
 
A) ¿Quién dice la gente que es el Hijo del Hombre?
 
Cesara de Filipo, cerca del monte Hermón a unos treinta kilómetros del Mar de Galilea, está en la frontera con el mundo pagano, y es la principal ciudad pagana. En tiempos pasados, la ciudad fue conocida por el culto a Baal y Pan que allí se efectuaba. En el tiempo de Jesús, había un templo dedicado al César. Parece ser que Jesús va ahí para escapar de las multitudes de Galilea y poder preparar a sus discípulos para la jornada hacia Jerusalén, que comienza en Mateo 19, 1; una jornada que terminará con su muerte y resurrección.
 
Jesús escoge este lugar pagano para revelarse más completamente a sus discípulos, tal vez dándonos una pista de su preocupación por todo el mundo que después hará explícito en la Gran Misión (28, 19-20). Más que decirles a los discípulos su identidad, les pide que le digan quién cree la gente que sea el Hijo del Hombre. Los discípulos le dicen a Jesús que la gente piensa que él es: Juan el Bautista; el profeta Elías, que se esperaba que reaparecería “antes que venga el día del Señor, grande y terrible” (Mal 4:5); el profeta Jeremías, que experimentó un gran rechazo y que lloró sobre la ciudad de Jerusalén. Alguno de los profetas. Es claro que la gente pensaba bien sobre Jesús y lo había considerado como profeta. Sí, Jesús es un profeta, pero es más que un profeta.
 
La respuesta que dan los apóstoles son una serie de piropos para cualquier israelita. Pero quien no tiene una experiencia personal de encuentro con Dios sólo ve y aprecia en Jesús el fenómeno, lo que aparece, un líder social, político, liberador, y es lógico: el ignorante, el que no conoce, ve simplemente lo que hay delante. El instruido, el que conoce, percibe más allá de lo que se ve.
 
 B) Y ustedes, ¿quién dicen que soy?
 
La pregunta real es lo que los discípulos piensan sobre Jesús. Cuando les dice “Y ustedes, ¿quién dicen que soy?”, el ustedes es tanto enfático como plural: se dirige a todos los discípulos más que solamente a Pedro. El pueblo es libre de creer cualquier cosa que quieran respecto a Jesús, pero Jesús ha estado preparando cuidadosamente a estos discípulos para continuar con su obra. Han escuchado sus enseñanzas y han sido testigos de sus milagros. Lo que piensan sobre él es crítico. Lo que nosotros contestamos también es crucial. A estas alturas la incertidumbre es igual a la falta de fe. Ser cristiano significa creer que Jesús es el Cristo, el Hijo del Dios vivo.
 
San Pedro sirve como el vocero del grupo. “Tú eres el Cristo” (Gr. Χριστός, Christós). La palabra Mesías (מָשִׁיחַ, Māšîa) y la palabra Cristo son la misma; una es hebreo y la otra en griego para designar al Ungido. Los reyes fueron separados para este cargo al ungirlos, tal y como hasta ahora. El Mesías, el Cristo, el Ungido es el Rey Divino de Dios.
 
San Pedro también dice que Jesús es “el Hijo del Dios vivo”. Jesús no solamente es el juez del futuro (el Hijo del Hombre), ni tampoco solamente el por tanto tiempo esperado Mesías del pasado (el Cristo); él es, como el Verdadero Hijo de Dios, la persona más importante en el presente. “El Dios vivo” contrasta dramáticamente con los ídolos sin vida de un lugar como Cesarea de Filipo.
 
Pero, además, cada uno de nosotros vamos revistiendo a Jesús de lo que nosotros somos. Y proyectamos en él nuestros deseos, aspiraciones, intereses y limitaciones. Pero Jesús sigue vivo. Al reconocerlo como el Hijo de Dios vivo tiene que culminar en nuestro trato positivo y bueno hacia a nuestros hermanos, demostrar realmente porque nos llamamos cristianos.
 
  C) Dichoso, Tú Simón, hijo de Juan
 
Pedro ha identificado a Jesús como el Hijo del Dios vivo. Ahora Jesús responde reconociendo a Simón como el hijo de Juan (Ar. Simón bar Ioná, Simón, hijo de Jonás) al mismo tiempo que le da su bendición. En el Evangelio de Juan, el padre de Pedro es identificado como Juan y no como Jonás (Jn 1, 42; 21, 15). Notemos que Jesús lo llama Simón, el nombre por el que su Padre lo reconocería, más que con el nuevo nombre que Jesús está por darle.
 
“Porque no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi Padre que está en los cielos.” Pedro no llegó a su discernimiento por una astucia espiritual. Dios le ha dado este entendimiento sobre Jesús. Este discernimiento de Pedro llega por revelación, por deducción. Esto también es para nosotros. No tenemos ninguna razón para ser orgullosos si sucede que estamos más despiertos espiritualmente que otros. Nuestra fe, igual que la de Pedro, es un don de Dios. Solamente desde el encuentro con Dios el hombre puede conocer el (Gr. Νοούμενoν, noumenon), la esencia, la realidad profunda de Jesús y llegar a la adhesión personal que es la fe. No podemos amar lo que no conocemos.
 
 D) Sobre esta Piedra edificaré mi Iglesia
 
La gente estaba acostumbrada a pensar en Dios como una roca (Gn. 49, 24; Dt. 32; Salmos 18, 28, 31, 42, 62, 71, 78, 89). Isaías también se refiere a Abraham y Sara como una roca: “Miren a la piedra de donde fueron cortados, y a la caverna de la fosa de donde fueron arrancados. Dadas estas asociaciones con la palabra, Jesús le hace un gran honor a Pedro cuando lo identifica con una Roca. Al mismo tiempo pone sobre él una gran carga de responsabilidad. Por la palabra roca el Salvador no podía haberse referido a sí mismo, sino solo a Pedro, ya que es más evidente en arameo, donde la misma palabra (kephá, כיפא) es usada para Pedro como roca. Su declaración admite entonces una explicación, a saber, que Él desea hacer de Pedro la cabeza de toda la comunidad de aquellos que creían en Él como el verdadero Mesías; que a través de este fundamento (el de Pedro), el Reino de Cristo sería inconquistable; que la guía espiritual de la fe estuviera establecida en las manos de Pedro, como el representante de Cristo.
 
Primeramente, cuando miramos el griego de Mateo 16:18, “Tú eres Pedro (Gr. Πέτρος, pétros), y sobre esta roca (πέτρα, pétra) edificaré mi Iglesia”. En el griego, los sustantivos tienen géneros (masculino y femenino). El primero es masculino, el segundo es femenino. De igual manera, la palabra “pétros” es masculina y “pétra”, es femenina. El nombre de Pedro se refiere en forma correcta a “pétros”. Pero Jesús dijo que la roca en la cual Él (Cristo), edificaría Su iglesia no se encuentra en el masculino de “pétros”, sino en el femenino de “pétra” Jesús no estaba diciendo que edificaría su Iglesia sobre un hombre, en este caso, Pedro; sino que lo haría sobre algo más. ¿A qué se refiere entonces el sustantivo femenino “pétra”?
 
Encontramos que se refiere a una gran masa inamovible de roca en la que una tumba es excavada (Mateo 27:60) y se usa, con referencia a Cristo: 1 Cor 10, 4 y 1 Pe 2, 8. Note que el mismo Pedro en su epístola y en este último versículo se refiere a Jesús como “pétra”, y no como a Él mismo. Si Pedro usa la palabra con referencia a Jesús y no a él mismo, ¿no deberíamos hacerlo nosotros también? Una piedra es movible, variable e inestable. Por lo tanto sigue la tradición de generación en generación y sigue estando Jesús presente en su Iglesia. Y dará tal estabilidad y seguridad a la comunidad, que, supe­rando problemas y dificultades, garantiza la pervivencia de la comunidad, que ha de seguir adelante hasta que se logre ple­namente el proyecto de Jesús.
 
 E) Te daré las llaves del Reino de los cielos
 
Esta frase tiene su raíz en Is, 22, 22, “Y pondré la llave de la casa de David sobre su Hombro (de Eliaquim); y abrirá, y nadie cerrará; cerrará, y nadie abrirá.” Así Eliaquim se convierte en el mayordomo de la casa, responsable de abrir la casa en la mañana, cerrarla por la noche y controlar el acceso a la presencia real. Atar y desatar también tienen que ver con reglas respecto a la doctrina y conducta ética. En el lenguaje rabínico atar y desatar es declarar ciertas acciones prohibidas o permitidas. Después la tradición cristiana extenderá este principio para incluir el poder de perdonar o retener ciertos pecados (18, 18); Jn 20, 23).
 
Y ahora Cristo hace partícipe a un hombre, a Pedro, sobre el que se edifica su Iglesia, de este poder de las llaves que llega hasta el más allá: lo que él ate o desate en la tierra, quedará atado o desatado en el cielo. Adviértase que tanto en la Antigua Alianza como en los casos de Jesús y de Pedro es siempre una persona muy concreta la que recibe estas llaves. En la Iglesia fundada por Cristo es siempre una persona muy determinada la que tiene la llave.
 
 F) Ordenó a sus discípulos que no se lo dijeran a nadie
 
Jesús todavía no está listo para que sus discípulos le digan al mundo su secreto. El mundo no está listo todavía para escuchar el secreto, y los discípulos todavía no están listos para revelar el secreto correctamente. Jesús no permite a los discípulos que revelen su identidad como Mesías hasta que ellos entiendan lo que esto involucra. No lo entenderán realmente hasta que vean al Cristo resucitado. Eso sucederá bastante pronto. Jesús comenzará su jornada hacia Jerusalén y la cruz el 19, 1.
 
Recomienda que filtren por su cabeza aquello que nace del corazón, que no sean impetuosos. Toda verdad, como toda confidencia, si no es liberadora y puede ser rectamente entendida no se debe decir. Hay que esperar el momento oportuno y buscar la manera adecuada.
 
Preguntas para la lectura
 
¿A dónde llegó Jesús?
¿Qué les pregunta a sus discípulos?
¿Y Para ustedes quién Soy?
¿Qué le contesta Pedro?
¿Qué le dijo Jesús a Pedro?
¿Qué les ordena a sus discípulos?
 
MEDITACIÓN 
¿Qué me/nos dice la Palabra de Dios?
¿Qué le respondo a Jesús cuando a mí me dirige esa pregunta esencial?: tú, ¿quién dices que soy yo? Esta pregunta de Jesús cuestiona toda mi vida: pensamientos, sentimientos, valores, planes, ideales, ocupaciones, actuaciones, conducta, familia, comunidad cristiana. ¿A qué Jesús estamos mostrando al mundo? ¿Será que soy capaz de mirar al Papa como piedra y sucesor de Pedro, o lo critico o pido por él?
 
ORACIÓN 
¿Qué le respondo al Señor, que le respondemos al Señor?
Gracias, Señor, porque nos invitas a mirarte tal cual eres y porque te has revelado como el Hijo de Dios vivo, que viene a salvarnos; por todas las gracias que nos regalas por medio de tu Iglesia y sus pastores como sucesores de los Apóstoles. Por eso te damos gracias Señor. Gracias Señor, gracias Señor.
 
Te pedimos perdón por las veces que no hemos confiado en tu misericordia y por las veces que hemos criticado a nuestros pastores en lugar de hacer oración y pedir por ellos, y cuando nos convertimos en jueces de nuestros hermanos. Por eso te pedimos perdón. Perdón Señor, perdón Señor.